La transferencia embrionaria es un procedimiento habitualmente sencillo, en absoluto doloroso, que no precisa anestesia, y que consiste en la ubicación, guiada por ecografía, de los embriones en el interior del útero materno.
¿Cuántos embriones se transfieren?
La decisión del
número de embriones a transferir se realiza siempre de forma individualizada en cada pareja, ya que depende de muchos factores: edad, embarazos previos, tratamientos fallidos previos, causa de la esterilidad, cantidad y calidad de los embriones, deseos de la pareja…
La legislación española vigente establece que el número máximo de embriones que se pueden transferir es de tres.
En
HM Fertility Center, como norma general, transferimos inicialmente los dos mejores embriones atendiendo a los parámetros de calidad embrionaria facilitada por nuestros embriólogos. Sin embargo, desde hace años, individualizamos el caso de cada pareja por lo que también puede suceder que recomendemos la transferencia de un único embrión, sobre todo en aquellos casos en los que hemos indicado un cultivo largo (transferencia en estadio de blastocisto), mientras que, por el contrario,
muy excepcionalmente o casi nunca recomendamos transferir tres embriones.
¿En qué consiste el proceso de transferencia de embriones?
La transferencia embrionaria al interior de la cavidad uterina es el último y decisivo paso en el
proceso para conseguir la gestación a través de una
ICSI. Puede realizarse a los dos, tres o cinco días después de la punción folicular. Los equipos de los HM Fertility Centers (clínicos y embriólogos, conjuntamente) son quienes
determinarán el día óptimo de la transferencia en función de tu caso específico.
El proceso es habitualmente sencillo e, igual que la punción, se realiza en el quirófano.
Previo a la transferencia se realiza una ecografía abdominal para valorar la posición del útero y el estado del endometrio. A continuación, el ginecólogo coloca un espéculo vaginal para visualizar el cuello uterino y realizar una limpieza cervical cuidadosa. La
transferencia de embriones se lleva a cabo con un catéter muy fino, elaborado con un material muy flexible, para no dañar las paredes del endometrio (mucosa que tapiza por dentro la cavidad uterina, que es el lugar donde acaece la implantación embrionaria).
No es un proceso doloroso, por lo que no necesita de sedación, y conlleva las mismas molestias mínimas que cuando tu ginecólogo te realiza una citología vaginal.
Una vez realizado este proceso se procede a la transferencia propiamente dicha que consiste en la introducción de un catéter específico en el interior de la cavidad uterina, siempre de forma ecoguiada, de manera que se visualiza perfectamente el lugar y el momento donde se dejan los embriones. La paciente no necesita estar sedada, pues no es un proceso doloroso.
Tras la trasferencia embrionaria, en recomendable permanecer en reposo durante unos minutos. Después se puede reanudar la actividad cotidiana sin problema, con unas mínimas restricciones.
¿Qué destino tienen los embriones no transferidos?
Si en el consentimiento informado que ustedes rubricaran con anterioridad al inicio del tratamiento de ICSI, han solicitado que se intenten fecundar todos los ovocitos maduros que se obtengan en la punción folicular, no es infrecuente que se generen más embriones de buena calidad que los que van a ser transferidos.
Estos
embriones serán vitrificados para ser transferidos en ciclos posteriores, sin que la paciente tenga que volver a someterse a otra estimulación ovárica y punción folicular. Llevaremos a cabo un ciclo de criotransferencia en el caso de que el primer ciclo con embriones en fresco no hubiese sido exitoso o en el caso de que la paciente quisiera volver a concebir en los años posteriores a haber logrado el embarazo en la transferencia de embriones frescos.